Quiero mirar al mundo, sentirlo, disfrutar el sol, acariciar las estrellas, saborear la mañana al despertar de una noche de sueños, quiero respirar el perfume de la tarde, conectarme con miradas y caricias; que vuele mi sombra con el viento, quiero sentir en el alma los murmullos, revivir en las palabras, construir mundos de ternura, enfrentar los misterios de los hombres. Contestar con un beso una sonrisa...
Quiero todo, todo y más, pero estoy solo, encerrado en un frío lienzo de un cuadro colgado en la pared.